Porque reaccionamos ante lo que no vemos bien, y como eso normalmente no gusta, el que tiene la sarten por el mango, aplica sus
democráticas recetas. Eso es mas fácil que ARGUMENTAR.
¡Calla niña y al rincón de pensar ¡
Pero es que....
¡Ni peros ni nada, a callar he dicho!