El tema es interesante, sin la menor duda, pero es muy amplio. A tener en cuenta los ¡22 reyes que tuvo León! Me meto, no me meto, me meto. Esperemos que la gente del foro se anime y participe. Bueno, pues "al loro".
Antes de entrar de lleno en el Reino de León, hagamos una memoria como si fueran los prolegómenos del citado reino.
Alfonso III el Magno fue el más grande de los reyes asturianos. En lucha contra los musulmanes llegaron sus correrías hasta Coimbra y Burgos. La península estaba dividida en dos campos significativos, uno el de la abundancia ¡cómo no! en manos de los musulmanes, y otro el de la escasez, el de la miseria en manos del cristianismo. Los musulmanes ocupaban la parte más fértil, los cristianos estaba relegados a las montañas o a llanuras no productivas y si a eso añadimos la pobre población, Alfonso III le cupo el honor de ir repoblando sitios como Simancas, Dueñas y Toro. Se puede decir que los musulmanes pusieron un muro entre éstos y los cristianos, vamos, lo que hoy llamaríamos: UNA LÍNEA ROJA.
Dicho lo cual, Alfonso III tuvo que repartir su territorio entre sus hijos. Los cronistas dicen, narran que hubo una conspiración de sus hijos contra él para que repartiera sus tierras. Alfonso III bien de una forma u otra hizo el reparto entre sus hijos. A García I le correspondió la zona leonesa. Ordoño II Galicia y a Fruela II, Asturias. Se firmaron documentos donde en un apartado se decía que si García I moría sin descendencia, ocuparía su hermano Ordoño II el reino de León. Así fue, García I murió sin descendencia y Ordoño II recibe el reino de León que al mismo tiempo fija la capital en la misma ciudad: REINO DE LEÓN.
Un saludo.
Antes de entrar de lleno en el Reino de León, hagamos una memoria como si fueran los prolegómenos del citado reino.
Alfonso III el Magno fue el más grande de los reyes asturianos. En lucha contra los musulmanes llegaron sus correrías hasta Coimbra y Burgos. La península estaba dividida en dos campos significativos, uno el de la abundancia ¡cómo no! en manos de los musulmanes, y otro el de la escasez, el de la miseria en manos del cristianismo. Los musulmanes ocupaban la parte más fértil, los cristianos estaba relegados a las montañas o a llanuras no productivas y si a eso añadimos la pobre población, Alfonso III le cupo el honor de ir repoblando sitios como Simancas, Dueñas y Toro. Se puede decir que los musulmanes pusieron un muro entre éstos y los cristianos, vamos, lo que hoy llamaríamos: UNA LÍNEA ROJA.
Dicho lo cual, Alfonso III tuvo que repartir su territorio entre sus hijos. Los cronistas dicen, narran que hubo una conspiración de sus hijos contra él para que repartiera sus tierras. Alfonso III bien de una forma u otra hizo el reparto entre sus hijos. A García I le correspondió la zona leonesa. Ordoño II Galicia y a Fruela II, Asturias. Se firmaron documentos donde en un apartado se decía que si García I moría sin descendencia, ocuparía su hermano Ordoño II el reino de León. Así fue, García I murió sin descendencia y Ordoño II recibe el reino de León que al mismo tiempo fija la capital en la misma ciudad: REINO DE LEÓN.
Un saludo.
Muy bien Ángel, me encanta la historia y la de León para mí es poco conocida.