Ni que decir de las estrellas errantes,
los planetas, entre las que destaca por su gran brillantez
Júpiter el astro de la noche. Si con un pequeño aumento
miramos a Saturno le vemos con la figura de un huevo
frito o cubierto con un sombrero.
Los modernos microscopios nos dan una visión de
un firmamento insondable, inconmensurable, infinito
y nos hablan de estrellas que están a distancias que solo
se pueden medir por años luz, que es el tiempo que en
un año tardaría la luz en llegar. Pues toda esta maravilla
está ahí porque sí, porque casualmente se han ido
construyendo así mismos con los bing bag que nadie
ha podido ver y con las explosiones de las novas, las
enanas, los agujeros negros y también los blancos, que
efectivamente están ahí y siguen unas leyes universales
que no creen que se las haya dictado nadie.
Stephen W. Hawking. En su libro La teoría del todo,
el físico expone una hipótesis novedosa. Propone partir
de la relatividad general y la mecánica cuántica, un mo
El regreso de Urien (libro)
los planetas, entre las que destaca por su gran brillantez
Júpiter el astro de la noche. Si con un pequeño aumento
miramos a Saturno le vemos con la figura de un huevo
frito o cubierto con un sombrero.
Los modernos microscopios nos dan una visión de
un firmamento insondable, inconmensurable, infinito
y nos hablan de estrellas que están a distancias que solo
se pueden medir por años luz, que es el tiempo que en
un año tardaría la luz en llegar. Pues toda esta maravilla
está ahí porque sí, porque casualmente se han ido
construyendo así mismos con los bing bag que nadie
ha podido ver y con las explosiones de las novas, las
enanas, los agujeros negros y también los blancos, que
efectivamente están ahí y siguen unas leyes universales
que no creen que se las haya dictado nadie.
Stephen W. Hawking. En su libro La teoría del todo,
el físico expone una hipótesis novedosa. Propone partir
de la relatividad general y la mecánica cuántica, un mo
El regreso de Urien (libro)