Todos sabemos que el ateísmo es una doctrina que niega explícita o implicitamente la existencia de Dios, así como toda conducta humana indicativa de que no se admite la realidad de Dios.
El agnosticismo y el exceptiscismo pueden considerarse también como formas del ateísmo, mientras que el primero niega el segundo pone en duda la capacidad del hombre para descubrir a Dios.
El nuevo talante del ateísmo moderno consiste en que no se trata de un ateísmo práctico o simplemente nihilista, y por tanto de la moral y de la justicia sino de un ateísmo positivo, constructivo, humanista.
Dios ha sido la realidad ilusoria que durante mucho tiempo ha usurpado los títulos de grandeza del hombre.
El agnosticismo y el exceptiscismo pueden considerarse también como formas del ateísmo, mientras que el primero niega el segundo pone en duda la capacidad del hombre para descubrir a Dios.
El nuevo talante del ateísmo moderno consiste en que no se trata de un ateísmo práctico o simplemente nihilista, y por tanto de la moral y de la justicia sino de un ateísmo positivo, constructivo, humanista.
Dios ha sido la realidad ilusoria que durante mucho tiempo ha usurpado los títulos de grandeza del hombre.