No se si sabréis que el Beato Juan Pablo II tuvo la humildad de pedir perdón por los pecados de la historia de la Iglesia.
Viendo lo que habéis escrito solo puedo lanzar una plegaria de misericordia para vososotros:
¡Perdónales Señor porque no saben lo que escriben!
¡No juzguéis y no seréis juzgados! ¡ojo!, ¡cuidadín!
Viendo lo que habéis escrito solo puedo lanzar una plegaria de misericordia para vososotros:
¡Perdónales Señor porque no saben lo que escriben!
¡No juzguéis y no seréis juzgados! ¡ojo!, ¡cuidadín!