Un niño de dos años falleció en pasado día 23 de julio en el Hospital Clínico de Valladolid al haber ingerido y haberse atragantado con frutos secos. El pequeño, que consumió varios anacardos, según fuentes conocedoras del caso, permaneció dos días en la UCI pediátrica. Los hechos ocurrieron en un pueblo de Palencia el jueves día 21, pe
Muy lamentable.