Taller de aprendizaje de poesía

Cuando un trabajo es bonito ¿qué importa que se repita, pasado un tiempo? Y este de la casa de tu madre con la acacia, que recuerdo, ha merecido la pena repetirse.

Te deseo un feliz y poco caluroso día.

Está es la acacia hija de la vieja que en 1916 plantó mi tía Alicia cuando se celebraba en las escuelas el día del árbol.

No la vió crecer porque emigró a La Argentina, pero a su sombra hemos crecido.

La nueva es un retoño que mi padre cuidó.

Bonita historia de generosidad y más bonito es tu reconocimiento.

Esa fachada es de la casa de mis padres, cuadro al óleo de un artista del pueblo. La acacia hija de la vieja que tuvieron que cortarla por enfermedad y que la plantó mi tía Alicia en 1930 antes de irse a Buenos Aires. La calle estaba sin asfaltar y se notan las roderas de los carros de labranza. Mi madre vive y tiene 91 años y seguro que la casa se la quedarán mis hermanas pequeñas que están locas por el pueblo.

Besos y gracias ... (ver texto completo)

OCTAVA REAL

Con cuanto amor recuerdo esta morada
y el entrañable pago del camino
a merced del Montoya en la ríada,
cuando el barro convierte el cristalino
espejo, en limo fértil y divino.
Volvería a la casa idolatrada
con la misma ilusión en la mirada
a contemplar esa Tierra del Vino. ... (ver texto completo)