Te honran esas palabras tan bonitas que dedicas a tus maestros y que haces extensivas a tus
familiares y
amigos.
Al mismo tiempo las palabras que nos dedicas a nosotros son un soplo de fresca brisa, brisa que necesitamos, suave, suave, pero lo suficientemente fuerte para que nuestro barco navegue a pesar de los elementos.
Querido
amigo/a, todo mi cariño y respeto.
LIRA
LLEGAS AL CORAZÓN
CON DARDOS DE CARIÑO Y SIMPATÍA,
DERROCAS SINRAZÓN,
NOS LLENAS DE ALEGRÍA
CONVIRTIENDO LA NOCHE EN CLARO DÍA.