SONETO ALEJANDRINO
A María Magdalena:
Con un llanto sincero, congoja y sufrimiento,
la rosa más hermosa, María Magdalena,
y con el alma alada transida por la pena,
le has hablado al Maestro de tu arrepentimiento.
De nadie ha sido nunca tu puro pensamiento,
los tonos de tu rostro recuerdan la azucena,
con ríos de cariño de belleza serena
demostrándole al mundo pureza y sentimiento.
Disfrutaste perdones que te otorgó EL SEÑOR,
consolaste a su madre con brío y con valor
te enfrentaste a la plebe, que no reconocía
la labor silenciosa tan plena de humildad,
la labor silenciosa plena de lëaltad*;
lecciones de cariño, entrega y simpatía*.
*Diéresis
*No hago sinalefa (cariño entrega)
Noemí
Este fue el primer soneto alejandrino que hice el día 22 de julio de 2010. Me lo ha recordado una
red social. La verdad que lo he retocado un pelín para eliminar unas terminaciones verbales de juzgado de guardia.
Un abrazo, Taller.