No me llames amor, llámame fuego;...

No me llames amor, llámame fuego;
fuego liberador, fuego invisible
el que destruye en todo lo posible
lo que tú te tomaste como un juego.

Sólo quiero minutos de sosiego
para hacer mi castillo irreductible.
Los días del amor desapacible
olvidados quedaron en un pliego.

Ya mi alma convertida en fortaleza
quiere pasión con paz y sin venganza
¡Fuera la sinrazón de mi cabeza!

Te quiero manso, humilde, sin alteza
entregando tu amor en la templanza,
sin rastro de poder ni de dureza.

Una mujer quiere expresarle a su amante como quiere ser amada. Lejos ya de los años de amor pasional, necesita ser querida sin estridencias, sin posesión, con lealtad y con delicadeza.

Soneto al estilo del poeta Antonio Gala, lo hice en octubre pasado.

Estructura ABBA, ABBA, CDC, CDC. Versos endecasílabos.