ADIÓS A CUBA...

ADIÓS A CUBA
Con ternuras de madre y piedades de hermana
me ofreciste un oasis de paz en esta guerra,
por eso al alejarse la errante caravana,
tu recuerdo en el fondo del corazón encierra;

y con él las tristezas de su otoño engalana...
Pupila que la muerte sin mirarte se cierra
no sabrá qué es belleza, porque tú eres, Habana,
la ciudad más hermosa que floreció en la tierra.

¡En mi adiós, como ofrenda, te dejo el alma mía!...
¡Que los dioses te amparen, ciudad de encantamiento,
y que siempre contemple la pupila viajera

sobre el maravilloso cristal de tu bahía
fulgurar ondulante a la gloria del viento
la estrella solitaria que brilla en tu bandera!...

Villaespesa, Francisco

En este magnñifico soneto, Viallaespesa liquida la pérdida de la última colonoa española, y con ello empieza el pesimismo expresado en el existencialismo de la Generación de 1898. En realidad la atracción hacia la belleza y el amor a Cuba no era más que la excusa apropiada para esconder el mal sabor que existía entre los intelectuales españoles de la época. La pérdida de las colonias y de la influencia de la grandeza de España en el mundo, significó un antes y un despuéss, que ha venido perdurando hasta nuestros días. Poe eso muchas veces la Poesía, y siempre la Literatura, son, en mi opinión, un referente fiel de la Historia.