COMENTARIO DEL TEXTO ANTERIOR:...

COMENTARIO DEL TEXTO ANTERIOR:

PLANO SINTÁCTICO:

Es un poema conceptista y por ello se producen numerosos juegos de palabras por lo que es un poema rico en recursos sintácticos, voy a poner ejemplos de esto: a lo largo de casi todo el poema se dan fenómenos de supresión sintáctica, es decir, de elipsis, por ejemplo: en el primer cuarteto se omite “es” en una ocasión, en el segundo se omite “es” pero esta vez de manera casi constante… Aparece un polisíndeton en el primer verso del poema; existe un paralelismo en el primer verso (pues es bimembre, así como alguno más del poema) y se dan varios hipérbaton, uno se encuentra en el segundo terceto.

PLANO SEMÁNTICO:

Es un poema repleto de metáforas; veamos algunas: en el primer cuarteto: “herida que duele y no se siente”, “un breve descanso muy cansado”; en el segundo cuarteto: “un descuido que nos da cuidado”, “un cobarde con nombre de valiente”; en el primer terceto: “enfermedad que crece si es curada”.
Se produce una cosa muy curiosa en este poema y es que las metáforas forman entre sus términos antítesis, “es hielo abrasador”, “es fuego helado”…
También hay numerosas sinestesias: “es hielo abrasador”, “es fuego helado”; así como también paradojas: “es hielo abrasador”, “es fuego helado”
Aparecen también en el poema la dilogía: “es herida que duele y no se siente”, está jugando con el significado del verbo sentir utilizándolo de manera diferente.

He encontrado también un eufemismo: “el postrero paroxismo” utiliza esta expresión en vez de dirigirse directamente a la muerte.
Hay personificaciones: “un cobarde con nombre de valiente”, se está refiriendo al amor durante todo el poema y aquí le ha atribuido una cualidad propia de un ser humano.

Como vemos es un poema lleno de figuras retóricas que precisamente busca con estas el ingenio del lector; este poema es el perfecto ejemplo de un texto conceptista. En este poema Quevedo habla continuamente del amor; un amor no realizado al que se dirige con el pesimismo y desengaño propios del barroco, esto unido a la mala experiencia en el ámbito amoroso del autor explican la actitud misógina que demuestra en estas líneas. La fuerza significativa del poema se encuentra en los dos últimos versos del poema.