VENUS LEJANA
Carita de niña buena,
Negros ojos centelleantes
Cuerpo de tigresa en celo
Con tu espléndida figura
Cautivas mi pensamiento.
Labios que llaman al beso
Pelo negro, azabache,
Que ni el mismo Goya pudo
Imaginar tal majeza.
Turbulentas redondeces,
Deseables, hechiceras,
Lujuria en forma de carne
Diosa que mora en la tierra.
Eso sos vos,
Que llenas de belleza
El espacio infinito,
Con el igneo blanco
De tu piel de rosa.
Goce para la vista,
Borrachera de deseo,
Que anulas a los sentidos
Con el soñar de tus besos.
Diosa del amor,
Perfecta y ajena,
A la que nunca
Rozará mi boca.
Ni entraré en tu cuerpo,
Voluptuoso, firme,
De pechos muy blancos,
Como blanco armiño.
Toda la vida
Toda la eternidad,
Sentiré el ansia
Que la vida niega.
Carita de niña buena,
Negros ojos centelleantes
Cuerpo de tigresa en celo
Con tu espléndida figura
Cautivas mi pensamiento.
Labios que llaman al beso
Pelo negro, azabache,
Que ni el mismo Goya pudo
Imaginar tal majeza.
Turbulentas redondeces,
Deseables, hechiceras,
Lujuria en forma de carne
Diosa que mora en la tierra.
Eso sos vos,
Que llenas de belleza
El espacio infinito,
Con el igneo blanco
De tu piel de rosa.
Goce para la vista,
Borrachera de deseo,
Que anulas a los sentidos
Con el soñar de tus besos.
Diosa del amor,
Perfecta y ajena,
A la que nunca
Rozará mi boca.
Ni entraré en tu cuerpo,
Voluptuoso, firme,
De pechos muy blancos,
Como blanco armiño.
Toda la vida
Toda la eternidad,
Sentiré el ansia
Que la vida niega.