SOMOS COMO EL AGUA.
Nuestra vida es
el agua que fluye
sin dejar de correr.
Buscando, sin querer
un lugar para descansar.
Al desembocar en tu corazón,
se hace un remanso de paz.
Mas, de pronto, aparecen
negros nubarrones en el cielo.
que amenazan con revolver
y ensuciar nuestra
forma de amar.
Pero, el agua de lluvia,
logra, nuestro amor purificar.
Y... como el agua corre
sin repetir el lugar.
Nosotros seguimos adelante,
sin volver la vista atrás.
Aquellas negras nubes,
se convierten en agua
limpia de lluvia.
Y... Ese agua, vuelve al mar.
Hoy en la playa,
cuando me acarició una ola,
te oí de nuevo susurrar.
Y... la ola notó cómo,
yo volvía a temblar,
igual, que temblaba
al notar tus brazos,
mi cuerpo abrazar.
Sí, ¡Somos cómo Agua de mar!
Mª José. D. R.
Nuestra vida es
el agua que fluye
sin dejar de correr.
Buscando, sin querer
un lugar para descansar.
Al desembocar en tu corazón,
se hace un remanso de paz.
Mas, de pronto, aparecen
negros nubarrones en el cielo.
que amenazan con revolver
y ensuciar nuestra
forma de amar.
Pero, el agua de lluvia,
logra, nuestro amor purificar.
Y... como el agua corre
sin repetir el lugar.
Nosotros seguimos adelante,
sin volver la vista atrás.
Aquellas negras nubes,
se convierten en agua
limpia de lluvia.
Y... Ese agua, vuelve al mar.
Hoy en la playa,
cuando me acarició una ola,
te oí de nuevo susurrar.
Y... la ola notó cómo,
yo volvía a temblar,
igual, que temblaba
al notar tus brazos,
mi cuerpo abrazar.
Sí, ¡Somos cómo Agua de mar!
Mª José. D. R.