ACACIA
Huele el aire a pradera,
huele a pasto de dehesa embriagada de amapolas
de otoño;
huele a ti, árbol intemporal rezumando dignidad
como labriego castellano.
Dador de sombra,
guardián de senderos,
logro centenario,
superviviente del cierzo,
ejemplo de rectitud.
De ti aprendió a vivir la generación maltratada.
Te miman las nuevas generaciones bebiendo tu sombra en ti.
Han aprendido a
necesitarte y conocerte.
Si te invade el desaliento y la añoranza,
piensa en quien te hizo crecer;
le has sobrevivido porque eres árbol eterno,
acacia nevada de recuerdos de primavera.
Noemí
Huele el aire a pradera,
huele a pasto de dehesa embriagada de amapolas
de otoño;
huele a ti, árbol intemporal rezumando dignidad
como labriego castellano.
Dador de sombra,
guardián de senderos,
logro centenario,
superviviente del cierzo,
ejemplo de rectitud.
De ti aprendió a vivir la generación maltratada.
Te miman las nuevas generaciones bebiendo tu sombra en ti.
Han aprendido a
necesitarte y conocerte.
Si te invade el desaliento y la añoranza,
piensa en quien te hizo crecer;
le has sobrevivido porque eres árbol eterno,
acacia nevada de recuerdos de primavera.
Noemí
Biennnnnnnnn, muy muy bonito poema NOEMI.