Teobaldo.
Yo que soy la alegría
de la casa Capuleto
más flamenco que mi tia
más apañao que un puchero
mas con la espada mía
a su defensa estoy presto
porque otra espada no hay
aunque tu mamá nos diga
que tu padre, aun hoy
tiene buena puntería.
Ya no está pa muchos trotes
aunque fue buen elemento
bebiendo, hasta los topes,
comiendo, como un hambriento
y luchando era muy bravo
solo tenia un defeco
porque tocante a las faldas
ahí no había cerebro
por eso prima querida
has de tenerme respeto,
yo seré tu salvación
si aparecen los Montesco
que son gente bien perversa
aunque no aparentan serlo.
Yo que soy la alegría
de la casa Capuleto
más flamenco que mi tia
más apañao que un puchero
mas con la espada mía
a su defensa estoy presto
porque otra espada no hay
aunque tu mamá nos diga
que tu padre, aun hoy
tiene buena puntería.
Ya no está pa muchos trotes
aunque fue buen elemento
bebiendo, hasta los topes,
comiendo, como un hambriento
y luchando era muy bravo
solo tenia un defeco
porque tocante a las faldas
ahí no había cerebro
por eso prima querida
has de tenerme respeto,
yo seré tu salvación
si aparecen los Montesco
que son gente bien perversa
aunque no aparentan serlo.