Yo vi la faena de Antoñete en las Ventas el año 1.966. Estaba entonces yo, de Maestro en Somaén (Soria), y había ido a Alhama de Aragón con un amigo, en un hotel tomando un cubata vi una de las mejores faenas que he visto en mi vida. Eso influyó en mi, que entonces tenía 25 años y no era muy aficionado a los toros, a interesarme por este, para mí, arte, que quita el "sentío". Descanse en paz Antoñete, gran torero y gran persona. Gracias a él yo soy más taurino. De lo que me enorgullezco. Guardo gratísimos recuerdos de aquella comarca del Jalón a los que envio un cariñoso saludo.