Comprendo queridísima Marcella tu resentimiento, No debe ser nada facil sobrellevar una vida de frustracion y fracaso, yo sé que a tí en el fondo lo que te hubiese gustado es que alguien con clase y tronío te hubiera invitado una tarde de Abril a la Real Maestranza de Sevilla, o las Ventas que tampoco es moco de pavo, y hacerte ver luciendo peineta y mantilla en una calesa al lado de un apuesto caballero vestido de corto con un humeante habano y un clavel en la solapa; comprendo que es duro, pero si sigues por ese camino nunca lo conseguirás, cambia mujer cambia y a lo mejor algún ser piadoso te compadece y haciendo de tripas corazón decide pasar por ese mal trago de estar a tu vera en una tarde de feria.