Camina plácido entre el ruido y la prisa y piensa en la paz que se puede encontrar en el silencio. En cuanto sea posible y sin rendirte, mantén buenas relaciones con todas las personas. Enuncia tu verdad de una manera serena y clara y escucha a los demás, incluso al torpe e ignorante, también ellos tienen su propia historia. Esquiva a las personas ruidosas y agresivas, ya que son un fastidio para el espíritu. Si te comparas con los demás, te volverás vano y amargado, pues siempre habrá personas más ... (ver texto completo)
Jsele: pues mira tu, que todo esto me lo repito en mis muchos soliloquios, pero, salgo a la calle, los dramas reaparecen... y veo llorar a los gustos.
Y si comento, la desgracia ajena, se riemn de que sienta pena... mientras algunos reponden a mi impotencia con sonoras carcajadas en actitudes que queramos o no merman la libertad de las gentes.
! Claro que hay quienes aconsejan a su ira, que no vaya mas allá de gritos en sus doloridas gargantas (de estar calladas) hay limites.
Escribiría un largo mensaje, respondiendo, a lo mucho bueno que dice el tuyo, que hasta habla de Dios. Yo como poco creyente (tal y como están las cosas) diría que este no interviene para nada... que la luz es luz y la sombra sombra. Que el visitar los templos, es una cosa y ver crecer chabolas y palacios es otra... Que el "hermano hombre" se queda en algo muy bonito. Y que la realidad es otra: Que hermanos despojan a potros hermanos a cada hora del día. Y que no es preciso el rezo para saber que estoy haciendo con mis semejantes... malo que los hago llorar.
Y a propósito de llorar: aquel que no haya aprendido ha hacerlo, estoy seguro que no sabe lo que es ser feliz.
Me gusta leer y detenerme donde se dice algo sensato.
Con gran satisfacción te saludo. ... (ver texto completo)
Y si comento, la desgracia ajena, se riemn de que sienta pena... mientras algunos reponden a mi impotencia con sonoras carcajadas en actitudes que queramos o no merman la libertad de las gentes.
! Claro que hay quienes aconsejan a su ira, que no vaya mas allá de gritos en sus doloridas gargantas (de estar calladas) hay limites.
Escribiría un largo mensaje, respondiendo, a lo mucho bueno que dice el tuyo, que hasta habla de Dios. Yo como poco creyente (tal y como están las cosas) diría que este no interviene para nada... que la luz es luz y la sombra sombra. Que el visitar los templos, es una cosa y ver crecer chabolas y palacios es otra... Que el "hermano hombre" se queda en algo muy bonito. Y que la realidad es otra: Que hermanos despojan a potros hermanos a cada hora del día. Y que no es preciso el rezo para saber que estoy haciendo con mis semejantes... malo que los hago llorar.
Y a propósito de llorar: aquel que no haya aprendido ha hacerlo, estoy seguro que no sabe lo que es ser feliz.
Me gusta leer y detenerme donde se dice algo sensato.
Con gran satisfacción te saludo. ... (ver texto completo)