EL AVION
Es el avión, sin lugar a dudas, el medio de transporte más seguro, más limpio y más rápido, de todos los que podemos utilizar en nuestros días pero no es menos cierto que también el transporte aéreo tiene sus defectos, sus inconvenientes y algo que a muchos viajeros les es imposible superar un miedo atroz que les hace pasarlo francamente mal cada vez que se ven obligados a hacer uso de un avión.
Uno de los inconvenientes que yo le veo a volar es que te obligan a estar en el aeropuerto, por lo general, dos horas antes de iniciar el viaje y se da la paradoja que el vuelo puede durar ¾ de hora pero sumándole las dos horas de estancia obligada en el aeropuerto ya nos vamos aun total de 2h ¾ de viaje.
Otro de los inconvenientes está en el equipaje porque te obligan a llevar un número determinado de kilos por persona, y un número máximo de maletas o bolsas de manera que si te pasas alguna de esas condiciones te cobran un suplemento que en la mayoría de los casos te cuesta tanto o más que el pasaje. Máxime cuando cada compañía tiene sus propias condiciones que varían de unas a otras y que te pueden llevar a confusión por la cual te verás obligado a pagar.
Sumemos a eso el control policial a la salida y a la llegada, si es en otro país distinto al nuestro, porque te lo miran todo, te prohíben llevar un montón de cosas, te cachean, te quitan los zapatos, casi te dejan en cueros y todo eso es tiempo que pierdes y nervios que vas acumulando y que te hacen pasar muy malos tragos.
Y ahora viene lo peor, si tú eres una de esas personas, como yo, que no pueden evitar tener un gran pánico a montar en un avión desde el momento en que entras en él, acomodarte, despegar, viajar aterrizar y abandonar la nave, tú ya no eres persona, tú eres un manojo de nervios, tú tienes el miedo en el cuerpo y estas en un sin vivir hasta el momento en el que pones los pies en el suelo.
Yo dentro de unos días, si Dios quiere, tengo que coger uno, y ya tengo mi cosilla en el estómago pensando en ese momento, en distancias nacionales me inclino por el coche o por el ave pero cuando se trata de distancias más grandes, y hacia el extranjero, no tienes más remedio que pasar por el aro y así lo haré, que remedio, pero no me gusta nada, el momento más temido para mi cuando aterrizas, el avión toca tierra y para pararse, la reducción de esa velocidad, el ruido que se origina y la sensación que me da de que le va a faltar pista, para mi es el momento más peligroso del viaje.
Pero que le vamos a hacer el progreso y el desarrollo nos obligan a veces a situaciones extremas en las que aunque sufrimos con algo hemos de hacerlo para poder disfrutar después con todo lo demás.
Es el avión, sin lugar a dudas, el medio de transporte más seguro, más limpio y más rápido, de todos los que podemos utilizar en nuestros días pero no es menos cierto que también el transporte aéreo tiene sus defectos, sus inconvenientes y algo que a muchos viajeros les es imposible superar un miedo atroz que les hace pasarlo francamente mal cada vez que se ven obligados a hacer uso de un avión.
Uno de los inconvenientes que yo le veo a volar es que te obligan a estar en el aeropuerto, por lo general, dos horas antes de iniciar el viaje y se da la paradoja que el vuelo puede durar ¾ de hora pero sumándole las dos horas de estancia obligada en el aeropuerto ya nos vamos aun total de 2h ¾ de viaje.
Otro de los inconvenientes está en el equipaje porque te obligan a llevar un número determinado de kilos por persona, y un número máximo de maletas o bolsas de manera que si te pasas alguna de esas condiciones te cobran un suplemento que en la mayoría de los casos te cuesta tanto o más que el pasaje. Máxime cuando cada compañía tiene sus propias condiciones que varían de unas a otras y que te pueden llevar a confusión por la cual te verás obligado a pagar.
Sumemos a eso el control policial a la salida y a la llegada, si es en otro país distinto al nuestro, porque te lo miran todo, te prohíben llevar un montón de cosas, te cachean, te quitan los zapatos, casi te dejan en cueros y todo eso es tiempo que pierdes y nervios que vas acumulando y que te hacen pasar muy malos tragos.
Y ahora viene lo peor, si tú eres una de esas personas, como yo, que no pueden evitar tener un gran pánico a montar en un avión desde el momento en que entras en él, acomodarte, despegar, viajar aterrizar y abandonar la nave, tú ya no eres persona, tú eres un manojo de nervios, tú tienes el miedo en el cuerpo y estas en un sin vivir hasta el momento en el que pones los pies en el suelo.
Yo dentro de unos días, si Dios quiere, tengo que coger uno, y ya tengo mi cosilla en el estómago pensando en ese momento, en distancias nacionales me inclino por el coche o por el ave pero cuando se trata de distancias más grandes, y hacia el extranjero, no tienes más remedio que pasar por el aro y así lo haré, que remedio, pero no me gusta nada, el momento más temido para mi cuando aterrizas, el avión toca tierra y para pararse, la reducción de esa velocidad, el ruido que se origina y la sensación que me da de que le va a faltar pista, para mi es el momento más peligroso del viaje.
Pero que le vamos a hacer el progreso y el desarrollo nos obligan a veces a situaciones extremas en las que aunque sufrimos con algo hemos de hacerlo para poder disfrutar después con todo lo demás.