Triste final para el pequeño Julen, después tantos días no podía ser de otra forma, nos queda el sentimiento de solidaridad de los que han trabajado sin escatimar esfuerzos, un valor inestimable para está sociedad que no pocas veces nos muestra la insolidaridad y el egoísmo, un aplauso para todos ellos, quedarán durante mucho tiempo en nuestra memoria.