Cantando espero la muerte,
que hay ruiseñores que cantan,
encima de los fusiles
y en medio de las batallas.
Morir al lado de mi amor (como canta Demis Roussos), sin dolor, incinerado y que mis cenizas vuelen desperdigadas por los bellos montes de mi pueblo, desde un lugar que me apasiona, que le llaman La Peña, lo que es.
que hay ruiseñores que cantan,
encima de los fusiles
y en medio de las batallas.
Morir al lado de mi amor (como canta Demis Roussos), sin dolor, incinerado y que mis cenizas vuelen desperdigadas por los bellos montes de mi pueblo, desde un lugar que me apasiona, que le llaman La Peña, lo que es.