Estimada compañera de Foro, Gloria Ana. He quedado impresionado por la muestra de títulos expuestos en tu post. Ahora bien, pasado el primer momento de estupor, me he dado cuenta de que tras el argumentario legal, el corolario de conclusiones son pobres e inexactos. La primera característica de una ley o de un conjunto de leyes, es que se pueden eliminar o cambiar cuando convenga. Ese "convenga" es muy amplio y variopinto. Te remito, como ejemplo a lo que hizo Franco inmediatamente del Golpe de Estado, con todo el aparato legal existente. O lo que hicieron hace unos meses, tomandose un cafelito, dos "enemigos irreconciliables" del PP y del PSOE cambiando La Sagrada Constitución
para limitar el techo de gasto, etc. En fin, el rosario de ejmplos a este respecto seria largo y extenso, por ello creo que todas las cosas se deben valorar y ver en su justa dimensón. Tambien con la Ley.
Por lo tanto, rechazo de plano que la solucion sea votar repitiendo el mito de Sísifo en nuestro momento actual. El derecho al "no voto" es tan legítimo como el derecho al "voto". Puede parecer una paradoja, que tu expones tramposamente (dicho con cariño) que si nuestros antecesores se dejaron hasta la vida en múltiples casos por alcanzar la Democrácia y su mecanismo, el voto. ¿Como es que muchos demócratas, en la España de hoy, proponen no votar? Hay que decir lo siguiente: Esa proposición es puntual y rompedora para una situacion institucional, perversa, irresoluble de puertas para dentro, y que ha alcanzado la capacidad automática del movimiento contínuo, a causa de la hipertrofia del bipartidismo interesado PPSOE, de los nacionalismos vasco y catalan, y de la inutilidad operativa a efectos prácticos de las minorias parlamentarias como se lleva viendo en las últimas décadas. En lenguaje coloquial, ante un juego tramposo, de lo que se trata es de romper la baraja deslegítimando a una clase política que, salvo excepciones personales, es presa y partícipe a la vez de un sistema del que apenas queda la carcasa envolvente, y cuyo contenido se debe restablecer por la acción de la ciudadanía desde el exterior.
Aún así, las cosas son muy complejas. No sabemos que podría pasar si una votacion masiva de voto blanco, equivalente a una abstencion del 70/80 % llenara el Congreso de los Diputados de sillones vacios, mirando con sus invisibles ojos
al resto de diputados. Pero lo que si es seguro, es que ni PP ni PSOE van a renunciar a su status actual, los minoritarios ascendentes, IU y UPyD, estan como unas castañuelas al pasar de 5/6 a 10/11 escaños. En definitiva mas de lo mismo, y la situacion cada vez peor, mas paro, miseria, recortes, pérdida de todo lo conquistado en 100 años de lucha, represión creciente, etc. etc.
Todo muy negro, y puede ser peor aún. Que no se nos olvide la Europa de 1933.
Un saludo,
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