Lo cierto es que es un absurdo organizar un gabinete de crisis, ante una situación sanitaria como la actual, con personas políticas y no con expertos en el Ébola. En mi opinión las posibles soluciones a los problemas que surgen en estos casos, sólo pueden ser afrontadas por personas conocedoras y experimentadas sino en el mismo caso en otros similares; es una pérdida de tiempo que los políticos implicados tengan que intervenir de intermediarios entre tales personas y los problemas derivados de la ... (ver texto completo)