LUTO POR UNAS BOTAS (De mi libro “Los pasos arrastrados y otros relatos)
Genaro era uno de esos hombres que nacieron para pasar por la vida sin pena ni gloria –como tantos de nosotros–; pero él lo supo siempre, desde que viera a sus compañeros, cómo piropeaban a las chicas y cómo en clase no se paraban ante ningún reto.
Eternamente tímido, porque sabía que su físico no acompañaba y su elocuencia no existía. Alto, desgarbado, con gruesas gafas, de lengua torpe, y un halo permanente de desconcierto; ... (ver texto completo)
Genaro era uno de esos hombres que nacieron para pasar por la vida sin pena ni gloria –como tantos de nosotros–; pero él lo supo siempre, desde que viera a sus compañeros, cómo piropeaban a las chicas y cómo en clase no se paraban ante ningún reto.
Eternamente tímido, porque sabía que su físico no acompañaba y su elocuencia no existía. Alto, desgarbado, con gruesas gafas, de lengua torpe, y un halo permanente de desconcierto; ... (ver texto completo)